EL ENIGMA SIN RESOLVER DEL MAPA DE PIRI REIS

Mapa Piri Reis

EL ENIGMA SIN RESOLVER DEL MAPA DE PIRI REIS

Cuando Gustav Adolf Deismann recibió de parte del gobierno turco el encargo de catalogar la biblioteca del Palacio de Topkapi, jamás habría sospechado que al hacerlo se toparía con uno de los documentos más enigmáticos que existen en el mundo.

En octubre de 1929, mientras revisaba los documentos de la biblioteca, Deismann encontró los fragmentos de un mapa antiguo dibujado sobre piel de gacela. Aparentemente no era muy diferente de otros mapas que los marinos medievales habían utilizado para orientarse en los mares, salvo por un detalle. Contenía los perfiles de costas que, en teoría, eran desconocidas para los marineros euroasiáticos de la época. Era un mapa imposible.


Contenidos


¿Quién era Piri Reis?

Ahmed Muhiddin Piri, o Piri Reis, nació en Galípoli, en la costa occidental de Turquía, en 1465. Creció en una familia de marinos, entre los que destacaba su tío Kemal Reis, un temible corsario otomano. Siguiendo la tradicional familiar, el joven Piri Reis se embarcó muy joven en diferentes expediciones y progresó hasta convertirse él mismo en un hábil navegante y excelente cartógrafo. Habilidades que, bien combinadas, le permitieron alcanzar la categoría de almirante de la flota otomana en tiempos de Solimán el Magnífico, a quien impresionó con la elaboración de un completísimo atlas naútico.

Pero Piri Reis no era sólo un excelente marino, era también un hombre de gran curiosidad intelectual que tenía conocimiento de varios idiomas además del turco. Esto le habría permitido acceder con facilidad a la información reunida por navegantes de otras culturas.


Los enigmas del mapa

El mapa encontrado en el Palacio de Topkapi está repleto de detalles fascinantes. En él se puede ver con claridad las siluetas de la Península Ibérica y de las costas del norte de África, lugares ampliamente conocidos desde mucho tiempo atrás. Sin embargo, el misterio surge más allá del Océano Atlántico. Porque al otro lado del mar aparecen dibujados los contornos de unas tierras que no eran familiares para los navegantes europeos y turcos de la época: la costa oriental de América, apenas explorada, especialmente en su parte más meridional. El mapa parece representar el perfil costero y las desembocaduras de los ríos del nuevo continente desde el Caribe hasta el extremo sur, alcanzando incluso las tierras de la Antártida.

El mapa de Piri Reis está fechado en el año 919 del calendario musulmán, que equivaldría al año 1513. En aquel momento, los exploradores europeos tenían un conocimiento muy limitado de un continente que estaba recién descubierto para ellos. Y aunque ya algunos especulaban con la existencia de tierras muy al sur, la Antártida era absolutamente desconocida, y lo seguiría siendo oficialmente hasta el año 1820. Para ahondar aún más en el misterio, estas supuestas costas antárticas no aparecerían en el mapa con el perfil que habría tenido en aquella época sino con el de la tierra firme, oculta bajo las gruesas capas del hielo permanente desde hace milenios.

El mapa no se limita a las referencias geográficas. Incluye también ilustraciones sobre los animales que pueblan dichas tierras (entre ellos, cérvidos en la hipotética Antártida no helada) y multitud de anotaciones al margen, algunas de ellas ciertamente curiosas.


OBJETOS HISTÓRICOS ENIGMÁTICOS QUE ME INSPIRARON (1): EL MECANISMO DE ANTICITERA

Mecanismo Anticitera

¿Y si alguien hubiera construido un ordenador... en la Antigua Grecia?

La historia del Mecanismo de Anticitera arranca en 1900 de la manera más insospechada. En aquel año, unos humildes buscadores de esponjas griegos —sí, tal profesión existía por aquel entonces; y era una muy dura, por cierto— se toparon por pura casualidad con los restos de un naufragio mientras buceaban... Sigue leyendo

El origen del mapa

Se creee que para dibujar su mapa, Piri Reis se habría basado en otro anterior obtenido de manos de un prisionero español, un marino capturado por su tío Kamal. Este navegante habría estado en posesión de un mapa creado durante alguno de los viajes de Cristóbal Colón a América. Piri Reis se habría valido de estos conocimientos y los habría complementado con otras cartas de navegación, incluyendo probablemente alguna de origen portugués.

Sin embargo, todas estas fuentes no serían suficientes para explicar el aparentemente amplio conocimiento de Piri Reis de territorios inexplorados. A este respecto, en uno de los márgenes, el autor hace una mención que resulta especialmente llamativa. Afirma en ella que el mapa es fruto de, entre otros, los datos obtenidos de 'los antiguos dioses del mar'. A día de hoy no se sabe a ciencia cierta a quién hacía referencia Piri Reis con este calificativo. ¿Estos hipóteticos dioses del mar conocían con detalle el continente americano? ¿Navegaron acaso las costas antárticas milenios atrás?


La teoría académica acerca del mapa

Aunque las tierras más cercanas al Caribe parecen guardar similitud geográfica con la realidad, la precisión en los detalles no es tanta a medida que el mapa avanza hacia el sur. Una de las mayores objeciones al mapa está en el hecho de que la supuesta Antártida aparece como un apéndice o continuación del extremo meridional de Sudámerica. Ambas tierras aparecen unidas y no hay rastro del Pasaje de Drake, el tramo marítimo que las separa.

Además, las representaciones gráficas en esta área del mapa también resultan algo insólitas, con animales desconocidos y seres que rozan lo fantástico y lo mitológico.

Por ello, muchos expertos opinan que Piri Reis en realidad no está representando un lugar cierto y explorado, sino la conjetura de unas tierras ignotas cuya existencia se conocía o al menos se intuía, y que las incluye en su mapa a modo de 'Terra inognita' y de advertencia de los peligros desconocidos que quien se aventurara en ellas podría afrontar. Una costumbre habitual en los mapas de la época.


El encanto del misterio

La figura de Piri Reis y su enigmático mapa siguen fascinando e intrigando a historiadores y curiosos. Aunque el misterio que rodea las fuentes de sus conocimientos sigue sin tener una explicación definitiva, sus mapas permanecen como el testimonio de su enorme habilidad como cartógrafo. El mapa hallado en el palacio de Topkapi destaca como un logro notable, con un nivel de detalle y precisión muy destacable para su época. Mientras se siguen buscando nuevas pistas que puedan algún día arrojar nueva luz sobre los misterios del mapa, sus interrogantes, acrecentados por el hecho de ser un tesoro que a pesar de su popularidad no es visitable y permanece oculto al público, siguen ofreciendo un encanto innegable para la imaginación.

Con la tecnología de Blogger.